En este mundo de oportunidades constantes, los aeropuertos experimentarán una posición envidiable, ya que muchos factores que actualmente siguen haciendo lenta la implementación en las calles y carreteras, no existen en las pistas.
Los aeropuertos son ambientes privados, que establecen sus propias normas y reglamentos, por lo tanto, son capaces de adaptarse rápidamente a las nuevas tecnologías o conceptos. Los aeropuertos también son entornos controlados, donde las situaciones se pueden prever y será suficiente con un razonable nivel de complejidad en materia de seguridad en pistas de despegue y aterrizaje gracias a los equipos de medición de coeficiente de fricción o rozamiento.
Hoy en día, el conjunto de operaciones necesarias para obtener dicho coeficiente y tomar medidas preventivas de seguridad aérea es de vital importancia en aquellos aeropuertos que a menudo tienen condiciones meteorológicas adversas (tormentas, hielo o nieve).
Para medir este coeficiente se usan vehículos especialmente adaptados o bien un remolque que porta el equipo necesario. Además de las mediciones en pista, el equipo es programable para realizar mediciones en calles de rodaje, o cualquier otra superficie, como por ejemplo autopistas viales.
De este modo, se obtienen los siguientes beneficios:
- Determinar las características de fricción (frenado) de las pistas en condiciones normales y extraordinarias como ser lluvia, nieve y/o hielo.
- Verificar el estado de fricción de pistas o carreteras, nuevas, repavimentadas, en condiciones de humedad, con poco drenaje y contaminadas.
- Verificar el mantenimiento y continuidad de los Estandares Internacionales de Fricción en todas las pistas y generar una base de datos eficaz que permita demostrar la aplicación de Sistemas de Seguridad Internacional.